sábado, 27 de junio de 2015

Un recuerdo inventado

“!Huelga! ¡Papel Confort!” Lo recuerdo como un movimiento social tan aguerrillado como el estudiantil. Cientos de niños entre 3 y 5 básico marchábamos furiosos en el recreo de 9:45 a 10:00 por el derecho de higiene esencial que todo niño de 9 años se merece. Fue transversal, el movimiento cruzó por todos los colegios; públicos y subvencionados. En algún momento llegó al nuestro y lo explotamos por meses, hasta que llegó la temporada de las bolitas.
Hoy nadie recuerda a la huelga por el papel confort, casi como si no hubiese existido, como si me lo hubiera inventado.

Lo había dado por perdido hasta que Verde me envió un inbox en caps lock “I REMEMBER! Pero no me acuerdo tanto de la escena, solo del ritmo de huelGA papEl confÓrt". Entonces comprendí que lo creamos nosotros, que no fue transversal, que no éramos cientos, a lo más un grupo de 20 pendejos sucios y lo peor, que duró sólo un mísero recreo. Verde no sabe quién lo inició o por qué, el tema era que papel confort, en los baños de nuestro colegio, nunca faltó.

lunes, 27 de abril de 2015

Sopita de tomates

Sopita de tomates, esa es la que me gusta. No, de espárragos no, porque hacen que el pipí huela mal. Tampoco de pollo porque esa debe reservarse para cuando se está enfermo.

Quiero siempre sopita de tomates, con una taza de cabellos de ángel, sal y un poco de polvo que viene en un frasco que dice :aliño completo. Nadie sabe que trae ese aliño pero cuando lo agrego al agua roja me siento como un chef.

Sopita de tomates que se hace sola y en 10 minutos, que mata el hambre y el frío y además engorda poquito.  Sopita de tomates de la que se ríe tu mamá porque la hago con salsa de frasco y no con frutas de verdad.

Sopita de tomates que esperas que se enfríe un poquito para no quemarte, y si no se puede esperar se sorbetea, así: uupprrrr. Y es que a veces la fatiga es más grande.

Sopita de tomates siempre tendremos, las risas y las travesuras también. Siempre tendremos los viajes en el auto escuchando a Favio, a Fernando Ubiergo y hasta a Luis Miguel. Siempre tendremos las noches a escondidas y los 10 minutos más "que no quiero que te vayas, que afuera hace frío".
Siempre tendremos los ojos apretados en los carretes, como un beso secreto.
Siempre tendremos las discusiones tontas que se arreglan con un abrazo por la espalda o con tomar la mano que está en la palanca de cambios, mientras cruzamos Kennedy a 100 km/hr.
Siempre tendremos los defectos y eso para mi es perfecto, es real y es nuestro.
Y sopita de tomates, sopita siempre tendremos.

Carta a Plutón

Querido Walito,

Las cosas aquí se han puesto feas últimamente. No sé si te llegan las noticias, voy a tratar de adjuntar La Segunda, LUN, La Cuarta, The Clinic y El Mercurio, como para tener variedad de fuentes y puntos de vista digo yo ¡pero no los uses solo para hacer puzzles y sudokus!

¿Cómo van las cosas por allá? ¿Estás comiendo bien? ¿Sigues siendo vegetariano? ¿Aún te comes las uñas? ¿Sigues usando la polera negra con calavera? Acá la usabas mucho pero quizás la moda de Plutón te cambió.

¿Aún escribes solo con negro? El año pasado te envié una caja de puros lápices bic, de esos que me quitabas en clases de historia. Hace poco me llegó una notificación desde Saturno, aparentemente algo salió mal y el cargo se arruinó: "Es parte de los riesgos", me dijeron, pero a mi se me hace que se los robaron.

El otro día me llamaste vía sueños... ¡y nos peleamos! No me acuerdo por qué, ni si quiera recuerdo de qué hablábamos antes de discutir ¡Imagínate! Me llamas para ponernos al día y terminamos en gritos.

Lo único que espero es que todo haya sido por unos audífonos rotos y no porque no te guste la persona en la que me he convertido en estos 5 años.

Kisses and Cake

Teffi

martes, 17 de febrero de 2015

La Teffi de 12

A veces me da por imaginar que diría la Teffi de 12 años si me conociera. Creo que me encontraría una persona bastante bacán y se pondría tacos para parecerse a mí.
Le gustaría mi tatuaje y se diría a si misma que cuando sea grande se va a hacer el mismo pero se inventaría un motivo propio.
Sería su inspiración porque decidí estudiar periodismo aun que todos me dijeron que cuando saliera no tendría trabajo y probablemente terminaría haciendo otra cosa.
Pensaría que ya lo máximo era que me hubiera ido de intercambio al otro lado del mundo. Se imaginaría que caminar por donde yo caminé se sentiría distinto, como en los sueños.

Si yo tuviera la oportunidad de conocerla le diría que no me siento tan bacán, que más bien pienso que soy del montón, que la mayor parte del tiempo creo que me equivoqué de carrera y que nunca voy a ser lo suficientemente buena, no como yo quiero. Pero sobre todo le prohibiría sentirse así cuando tuviera mi edad, que cuando tuviera 23 se tenía que sentir bacán. Le diría que no tuviera miedo de decirle "maricón" al que la estaba molestando, que se acercara y le volara el hocico de una cachetada y si le rompía la nariz, mejor. Le explicaría que una anotación en el libro, un ditation el sábado, una suspensión o estar en condicional por mala conducta valían la pena por la satisfacción que le iba a dar contestar algo, lo que fuera. La convencería que mandara a todos a la mierda, porque esa niña de 12 años era la más bacán del mundo.